Por Pedro Maldonado
En el mundo de la comunicación digital el tiempo, ahora más que nunca, es oro. Hoy en día la información nos llega por todos los medios, pero sobre todo por las redes sociales.
Bajo este contexto cada vez ganan mayor protagonismo redes como TikTok e Instagram que ofrecen la posibilidad de crear contenidos audiovisuales cortos, únicos, estimulantes y, de alguna manera, adictivos.
Estos contenidos, conocidos como reels, llegan en formato de video vertical (porque los vemos en el teléfono) y tienen una duración no mayor a 60 segundos (porque así lo establecen estas redes sociales en función de los tiempos que pasamos frente a las pantallas).
En tiempos de una digitalización ultra acelerada, el desafío para las empresas es aprovechar estos espacios para comunicar sobre sus productos y sus servicios, así como sobre lo que ocurre en sus distintas industrias.
¿Cómo lograr eso? Con contenidos auténticos, originales, directos, que surgen de manera orgánica y sin mayor producción. Es un asunto de disrupción e innovación, en el que la creatividad juega un rol fundamental y en el que las empresas van cambiando su chip para estar a tono con este nuevo modelo de comunicación.
Los emprendedores son los más animados a la hora de usar estas herramientas, por ser nativos digitales y por temas de presupuesto. Pero las empresas medianas y grandes también van descubriendo un nuevo canal para comunicar. Saben que 60 segundos de comunicación empiezan a marcar diferencias.