El “Tide Pod Challenge”, una clase magistral sobre prevención de crisis

Por: Bernarda Ortiz

Existen señales de alerta que pueden anticipar una posible crisis reputacional. Comentarios negativos en redes sociales, hashtags desfavorables sobre el sector, campañas de desinformación, feedback negativo de empleados y clientes, recall de productos, cambios en la legislación o recorte de personal, son solo algunos ejemplos.

Sin embargo, para Procter & Gamble y su marca Tide, la alerta vino de un desafío viral entre adolescentes que no solo representaba un riesgo para la reputación de la marca, sino también una amenaza para la salud pública, el “Tide Pod Challenge”.

Pero, ¿qué es un Tide Pod?, pues es una cápsula que contiene una combinación de alta concentración de detergente, suavizante y quitamanchas en una película soluble. En 2018 se viralizó en el “Tide Pod Challenge”, que consistía en ingerir una de estas cápsulas, una acción muy peligrosa, además de tonta.

¿Cómo respondió la marca?

Tide actuó con rapidez y proactividad. Solicitó a YouTube que eliminara los videos del “Tide Pod Challenge y lanzó su propia campaña en redes sociales, el mismo espacio donde se estaba viralizando el reto. Para reforzar su mensaje, la marca contó con el apoyo de Rob Gronkowski, jugador de la NFL, quien protagonizó un video advirtiendo de los peligros y recordando que los Tide Pods son exclusivamente para lavar, nunca para ingerir.

Aunque Tide no era responsable de las acciones de sus consumidores y su producto no presentaba fallas, la marca decidió abordar esta preocupante tendencia con una respuesta clara y directa, enfocándose principalmente en prevenir que más personas se sumaran al desafío.