Por Pedro Maldonado
Toda organización necesita siempre uno o varios voceros. Ellos tienen un rol fundamental como imagen y portadores de mensajes, por lo tanto deben estar preparados siempre y manejar un discurso estandarizado que permita posicionar a la organización, pero también hacer frente ante la opinión pública.
El o los voceros deben conocer en detalle el trabajo de la organización que representan. Tienen que manejar datos de la empresa, conocer con claridad los procesos, los cambios que ocurren al interior de la institución, el mercado, así como la coyuntura del país. Además, deben tener carisma para conectar con la gente y con los medios de comunicación.
Hoy en día, cuando la información circula cada vez a mayor velocidad y por un sinnúmero de canales, las organizaciones deben tener muy bien definido el mensaje que desean transmitir y los voceros que deben llevar ese mensaje. Es un tema estratégico.
También hay que tener en cuenta posibles crisis internas y externas, que pueden afectar a una empresa u organización. Allí también se cumple un rol vital desde la vocería a la hora de responder ante la ciudadanía, los consumidores, los colaboradores, los accionistas y otros públicos interesados en el desempeño de una organización.
