Por Pedro Maldonado
Toda organización debe contar con uno o varios voceros. La elección de este personaje es fundamental porque se convierte en la imagen, en la voz de la empresa ante distintos públicos. Su elección supone, además, un proceso en el que participan los responsables de comunicación, los altos directivos y los voceros seleccionados.
Una vez que se tenga elegido a ese rostro viene un proceso de entrenamiento o capacitación que implica una serie de pasos que son necesarios para que la vocería funcione. A continuación se detallan esos pasos y su relevancia:
El media training o el entrenamiento al vocero requiere someterle a entrevistas con periodistas reales. Las entrevistas pueden ser en estudio o sorpresivas. Siempre conviene grabarlas para analizar cómo actuó el vocero. Lo ideal es que el vocero sienta lo que es un estudio de TV, un programa en radio o un streaming en redes sociales con las respectivas luces, poco tiempo para hablar, preguntas provocadoras. .
Los mensajes a posicionar. Cuando un vocero llega a una entrevista en medios existe la posibilidad de que enfrente cualquier tipo de preguntas, de temas que tal vez no conozca. Entonces, antes de la entrevista, el vocero con la ayuda de su equipo de comunicación debe tener lista una batería de mensajes que posicionará durante la entrevista. Esos mensajes son una suerte de mantra que el vocero deberá saber de la ‘a a la z’.
Aceptar las críticas siempre ayudará porque será una manera de corregir varios aspectos. Desde lo que nunca debe decir, hasta la manera en la que se sienta o se expresa. Recordemos que el 90% de la manera de comunicarnos es no verbal y eso lo debe saber bien el vocero. Las críticas, además, permiten reconocer las debilidades y fortalecerlas.
Saber que sentir miedo a una cámara o a un micrófono es normal. Hablar en público no siempre es fácil, de hecho es uno de los mayores temores de las personas. Pero un vocero no puede sentir ese temor, así que su elección debe tener muy en cuenta este aspecto.
Conocer a los medios y sus audiencias. Hoy en día los portales digitales compiten de igual a igual con los medios tradicionales y la persona que da la cara por la organización debe estar muy consciente de eso. Lo que se dice en un medio pequeño puede ser replicado por uno grande; entonces hay que tratarlos a todos con la misma importancia. La humildad siempre es buena consejera cuando se trata de entrevistas o apariciones públicas.
