Por Benjamín Ortiz
La pandemia del COVID-19 ha obligado que las actividades humanas se desenvuelvan, a distancia. Desde las relaciones de amistad y de familia, hasta la educación en todos los niveles y el desempeño de distintos trabajos y prestación de toda clase de servicios, ahora se realizan a través de distintos software, a distancia.
La revolución del software para la comunicación a distancia había progresado a una velocidad vertiginosa en los últimos tiempos, al punto que las teleconferencias que eran un recurso reservado para las empresas grandes, que disponían de complicadas instalaciones en sus salas de reuniones, ahora están al alcance de cualquier persona u organización. Es probable que esas instalaciones privadas se conserven por razones de seguridad, pero ni ese motivo sería suficiente dado que la vulnerabilidad de la conexión vía internet o a distancia es un riesgo del que nadie está del todo libre.
Antes de la pandemia se había expandido del Skype en los celulares. Este software venía siendo usado como un recurso de comunicación telefónica, que ha funcionado y funciona como un servicio gratuito para los contactos del Skype, pero que con pago relativamente bajo se podría comunicar con los tradicionales teléfonos convencionales. Un costo muy inferior a las llamadas por los teléfonos de línea o el roaming internacional que llegaba a tener costos astronómicos.
El Skype ha servido también para llamadas grupales o video conferencias; sin embargo, han aparecido competidores muy fuertes que se posicionaron como un recurso de video conferencias para las reuniones en grupo. El más popular, ciertamente en Ecuador, es el ZOOM, que da servicios gratuitos con tiempo limitado, que admiten extenderse mediante el proceso de reconexión, con la incomodidad que ello implica. EL Zoom Pro o pagado permite reuniones hasta de 24 horas con grabación en la nube en el dispositivo de los anfitriones. Ha tenido problemas de seguridad que ha hecho que algunos usuarios emigren a otros software, aunque en realidad ninguno puede garantizar impenetrabilidad total.
EL software Cisco Webex Meetings ha sido utilizado por empresas que han necesitado comunicar departamentos o ejecutivos en distintos lugares, desde tiempos anteriores al “distanciamiento social” en el que vivimos. Tiene funciones gratuitas pero sus técnicas de encriptación han llevado que sea bien aceptado en el mundo corporativo.
El Microsoft Teams, al igual que sus competidores, comienza abriéndose espacio con muchas funciones gratuitas. Algunas grandes empresas lo están empleando por su capacidad y versatilidad y también porque es considerado menos vulnerable. Merecen especial mención las variantes para educación.
Menos populares, al menos en el ambiente ecuatoriano, es el GoToMeeting, que los usuarios le consideran ideal para video conferencias pequeñas, y el Jitsi Meet que es igualmente útil para reuniones pequeñas y que tiene buena fama en la protección de datos.
También está expandiéndose el uso de software para eventos que permite realizar, por ejemplo, ferias virtuales, exposiciones, reuniones científicas, con salas de conferencia simultáneas e infinidad de recursos que antes parecían posibles solo en el mundo de lo presencial. Es un recurso que hace poco pudo ser de ciencia ficción y en estos tiempos comienza a estar en la rutina de las personas y las organizaciones.